El naufragio del ferry Sewol en 2014, además de la tragedia humana, significó la disolución del Corean Coast Guard, para meterlo en las fuerzas policiales del Ministerio de Seguridad Pública. Pero, después de tres años de travesía del desierto, los coreanos acabaron copiando el modelo de la Agencia Estatal Independiente, en su caso, dentro del Ministerio de Océanos y Pesca.
Hoy, el Tribunal Supremo ha absuelto a nueve miembros de la cúpula de la Guardia Costera surcoreana, de la acusación de negligencia en el rescate de las personas a bordo del Sewol. Entre los encausados, estaba el ex-Director, por no tomar las medidas adecuadas al inicio del accidente. Concretamente se les acusaba de que deberían haber animado a los pasajeros a abandonar el barco y no cumplieron con ese deber.
Los acusados presentaron sus disculpas y excusas, pero declararon que su comportamiento no constituía delito. El más alto tribunal del país confirmó que las primeras sentencias no contenían errores en la interpretación de las leyes.
El tribunal de primera instancia dictó una sentencia absolutoria. Según éste, los guardacostas no podían haber evitado la tragedia y no fueron informados de que el Capitán y los miembros de la tripulación habían abandonado el ferry en primer lugar, con lo cual no podían dar la orden de abandono. En febrero de 2022, en segunda instancia, volvieron a ser declarados inocentes, por falta de pruebas de su mala conducta profesional.
Solo el antiguo Jefe del centro salvamento de Mokpo, acusado de instigar la creación de documentos oficiales falsos relativos a una orden de evacuación, fue condenado a 18 meses de cárcel.