En la Segunda Guerra Mundial, para asegurar el suministro tras el desembarco de Normandía, los aliados tuvieron que construir unos puertos transportables ante la imposibilidad de tomar los existentes en Francia.
Para ello, se ideó un tipo de puerto creado a partir de la unión de bloques de hormigón preformados, los cuales, serían remolcados a través del Canal de la Mancha. Una vez en su ubicación definitiva, se hundirían y se unirían unos bloques a otros hasta dar forma al puerto, por su similitud al apilamiento de las bayas de mora recibieron el nombre de “mulberry”.
Se crearon dos de estos puertos, el Mulberry A y el Mulberry B, el primero para montarlo los americanos en la playa de Omaha y el segundo para los británicos en Arromanches. El 9 de junio, tres días después del Dia D, los dos puertos estaban construidos, sin embargo, un temporal, el 19 de junio, arrasó el Mulberry A y daño el Mulberry B, los ingenieros británicos consiguieron reconstruirlo y mantener el suyo operativo. Para hacernos una idea de la obra, el puerto tenía 15 kilómetros de carretera construida sobre el agua uniendo los distintos espigones y atraques.
La Agencia Hidrográfica del Reino Unido, UKHO, ha hecho un levantamiento en 3D de los restos y además lo ha acompañado de fotos y documentos de la época.