El pasado temporal le hizo romper cabos en Marsella y aunque fondeó, acabo chocando con uno de los muelles, el resultado fue una raja de 30 metros bajo la flotación, el boquete le inundo dos compartimentos y le hizo escorar hasta tocar fondo, varios remolcadores ayudaron empujando a que no diese la vuelta. Ahora están trabajando en taponar el boquete y achicar los compartimentos. En cualquier caso, se demuestra empíricamente que con dos compartimentos inundados parece que no aguanta a flote.
Napoleon Bonaparte
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Vaya, menos mal que no pasan estas cosas solo en Algeciras o Mallorca, ¿verdad?
Y ahora aparecerá el portavoz oficial del equipo multidisciplinar de la Plataforma en Defensa del Sector Marítimo Pesquero de Galicia y también del Grupo de Expertos No Gubernamentales del Sistema Mundial de Socorro, grupo integrado en el primero, poniendo a caer de un burro a los gabachos por no llevar Oficial Radio a bordo.
El crucero es una maravilla, pero el nombrecito… Creo que dentro de 100 años seguiría resultando chocante que Alemania le pusiera de nombre a un crucero de placer el Adolfo Hitler.
Thomas Jefferson le dedicó unos pensamientos muy apropiados: “Un miserable que (…) provocó más dolor y sufrimiento en el mundo que cualquier otro ser que hubiera vivido anteriormente”