Aun estando de vacaciones, es difícil abstraerse de la actualidad y más veraneando en Mahón.
Los barcos se averían y eso lo sabemos todos, sino que se lo digan a la P&O; y a su Pride of Bilbao, pero la avería del Zurbaran ha dejado sabrosos comentarios en la prensa escrita.
Sorprende en el párrafo siguiente, los conocimientos adquiridos por la Guardia Civil en averías de motores marinos. Claro que si nadie informa que se ha roto la junta de la trócola, cualquier paisano se puede convertir en portavoz autorizado.
Al parecer, una avería en los inyectores del combustible podría ser la causa. Ésta es, al menos, la explicación ofrecida por la Guardia Civil el pasado viernes sobre el percance que sufrió el “Zurbarán” en la costa mallorquina, aunque representantes de Acciona no confirmaron este supuesto
También llama la atención, que un ilustre pasajero (¡no sabe usted con quien está hablando!) llame a la Delegación del Gobierno y en esa delegación, se tome la no menos sorprendente decisión de prohibir la salida del barco. No estaría de más que la noticia aparecida en ese periodico se ampliase con las razones que llevaron a tomar esa decisión y donde está recogida la competencia de la Delegacíon del Gobierno para parar un barco.
Ante esto, los pasajeros echaron mano del teléfono móvil y comenzaron a llamar a Guardia Civil y Policía Nacional. Uno de ellos, José Ignacio Colino, incluso, optó por la delegación de Gobierno. Allí, alertados de las intenciones del capitán, impidió que el barco dejara Valencia.