Conociendo la calma, disciplina y educación que acostumbran los pasajeros europeos que bajan en verano al moro, se lo tuvieron que pasar bien los italianos de la tripulación del SNAV Sardegna.
El caso es que en el viaje de vuelta de Marruecos para Francia el barco se averió y acabaron remolcados a Cartagena la noche del martes, a esas horas la aduana no suele funcionar aunque se habrán puesto las pilas, pero decirle a 800 pasajeros que se quedan en tierra a mitad de camino y que tienen que tirar por sus medios para Francia habrá sido para nota. La noticia está en La Verdad o la Opinión de Murcia.
A ver que cuenta la prensa francesa y alauita del incidente.
Hola
¡Pero viajan europeos en esa naviera?